Los rusos se enfrentan a problemas debido al déficit presupuestario: no hay alimentos ni medicinas
Las tiendas están prácticamente vacías: se han acabado las salchichas, el queso y los dulces, y los niños rara vez ven fruta. Lo único que se puede importar hasta ahora son cereales, que se entregan en invierno. Los vuelos de pasajeros vuelan sólo una vez por semana y sólo cuando hace buen tiempo. Así lo informa la publicación rusa "Moscow Times". La situación de la atención médica no es menos crítica.
El único paramédico del pueblo se fue en febrero y ahora tenemos que esperar una ambulancia desde Nizhnyoudynsk, que está a 200 kilómetros de distancia. Allí acuden los residentes a buscar medicinas. El jefe del pueblo, Andriy Romanov, explica los problemas relacionados con la falta de fondos y la guerra en Ucrania. Según él, las dificultades con la atención médica son típicas de muchas aldeas de la región: los médicos no van a las aldeas por problemas de vivienda y comunicación.
"Vamos a alejarnos 20 kilómetros de la ciudad; probablemente tengamos cerrados el 60 por ciento de las estaciones de paramédicos. Y parece que esta es la situación en toda la región", dijo Romanov. Negó los informes sobre una escasez total de alimentos, pero admitió que el suministro de alimentos se ha vuelto menos frecuente debido al alto costo de los vuelos.
Enviar un helicóptero cuesta alrededor de 650 mil rublos, mientras que un billete para un pasajero cuesta sólo 2 mil, lo que hace que los vuelos no sean económicamente rentables. En Yakutia se observan problemas similares. A partir del lunes 21 de octubre dejarán de funcionar allí las rutas de autobús que conectan los pueblos con el centro regional.
Los asentamientos remotos de la república ya están experimentando interrupciones en el suministro de productos frescos debido al déficit presupuestario. Recordemos, según los analistas rusos, que en septiembre de 2025 en la Federación de Rusia se detuvo el 38% de la capacidad del complejo de refinación de petróleo. Focus también informó que están circulando en línea vídeos y fotografías de refinerías rusas cubiertas con redes anti-drones y estructuras protectoras metálicas.