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Cómo no morir de hambre después de una guerra nuclear: una planta que puede sobrevivir al invierno nuclear

Los investigadores modelaron las condiciones del invierno nuclear y concluyeron que no toda la flora iría. En el caso de un supervulcano o una guerra nuclear en el suelo, cuando el sol está bloqueado, las plantas que no permitirán que la humanidad muera de hambre aún pueda permanecer, escribe Phys. org. El Grupo Internacional de Investigadores cree que el rescate debe buscarse en fuentes de alimentos estables, y las algas pueden ser una fuente.

Han sido ricos en nutrientes y han sido utilizados por comunidades costeras en muchos países con bajos ingresos durante siglos. Enfocado. La tecnología ha aparecido en su canal de telegrama.

¡Suscríbase a no perderse las últimas y más intrusivas noticias del mundo de la ciencia! "Las inversiones en la creación de granjas para el cultivo de algas pueden prevenir la hambruna global en escenarios donde la luz solar se reduce considerablemente", dice David Denkenberger, investigador de la Universidad de Canterbury en el Reino Unido.

Una nueva investigación ha demostrado que las algas son un producto universal que puede ser la fuente más importante de alimentos y energía cuando toda la otra vegetación será escasa debido a un desastre a gran escala. Según los científicos, las algas son bastante estables para sobrevivir y prosperar en los océanos incluso después de una guerra nuclear a gran escala. Los investigadores han construido su modelo basado en las algas marinas de Gracillaria tikvahiae.

Utilizando datos sobre el clima del invierno nuclear, los científicos modelaron el crecimiento de estas algas. Según las estimaciones, si comienza la guerra nuclear y se lanzarán miles de ojivas, entonces se lanzarán alrededor de 150 cucharaditas de hollín a la atmósfera de la Tierra, que bloquean la luz solar durante muchos años. Sin embargo, la pobre luz solar continuará siendo suficiente para la fotosíntesis y el crecimiento de las algas.

"En algunos tipos de algas, la necesidad de luz para la fotosíntesis es de solo 50-100 μmol de fotones", dice Michael Rleda, co -autor de investigación en la Facultad de Ciencias de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Filipinas. A modo de comparación, la luz solar en los trópicos al mediodía del día Clear puede alcanzar casi 2000 μmol de fotones. Entonces, las algas pueden satisfacer el 45% de la demanda mundial de alimentos en solo 9 meses de producción intensiva.

Pero también debe tenerse en cuenta que solo hasta el 15% de la dieta de una persona puede consistir en algas, porque contienen altos niveles de yodo. Además de los escenarios apocalípticos, las algas también pueden ser útiles como ayuda adicional con la seguridad alimentaria mundial en el cambio climático actual o la erupción de un gran volcán. Algas marinas que se suman a ensaladas o envuelven sushi ricos en proteínas, minerales, vitaminas, aminoácidos esenciales y ácidos grasos.

Según Romed, las algas serán adecuadas para el consumo humano, incluso en vista de la contaminación por radiación. Las algas absorberán contaminantes del medio ambiente, pero el nivel de sustancias tóxicas puede reducirse a seguros. "Se ha encontrado que el tratamiento y la preparación de algas para su uso, como lavado y secado, fermentación, blanqueo o cocción, reducen significativamente la concentración de yodo y metales pesados ​​en algas", resumió el científico.