A diferencia de las boyas de superficie o las estructuras flotantes, el sistema está completamente sumergido bajo el agua. Cada una de sus unidades consta de dos componentes principales: un núcleo central fijo adherido al fondo marino y un casco que se mueve verticalmente en sincronía con el movimiento de las olas. Entre los componentes se coloca una membrana de goma flexible llena de líquido y aire.
A medida que las ondas pasan sobre el convertidor de energía, los cambios de presión hacen que su carcasa se mueva hacia arriba y hacia abajo, lo que hace que el fluido pase a través de una turbina bidireccional que impulsa el generador. Gracias al ajuste fino, el "resorte" interno del sistema se ajusta para que su propia frecuencia corresponda al ritmo de las ondas. La resonancia resultante permite que el sistema se mueva en armonía con las olas, maximizando su conversión en energía.
Esta tecnología puede generar electricidad limpia y estable, que luego puede inyectarse directamente a la red de CC submarina. El sistema proporciona una eficiencia 5 veces mayor en comparación con los diseños tradicionales no resonantes. Según la empresa, cada dispositivo es compacto, consta de sólo dos piezas móviles principales y está fabricado con materiales reciclables. Una vez puesto en servicio, se espera que el sistema funcione durante muchos años prácticamente sin mantenimiento.
Esto debería reducir significativamente los costos a largo plazo y el impacto en el medio ambiente. Symphony Wave Power dice que se pueden conectar hasta 60 dispositivos bajo el agua para formar grupos de energía capaces de generar hasta 6 megavatios de electricidad. Los clusters podrán suministrar energía a islas remotas, plataformas marinas o redes energéticas costeras. Anteriormente escribimos sobre los tipos de calderas, precios y principios de funcionamiento.
Todos los derechos están protegidos IN-Ukraine.info - 2022