By Natali Moss
Nikkei Asia escribe al respecto. Actualmente, los fabricantes de baterías de drones chinos dicen que su negocio está prosperando porque venden sus productos para su uso en la guerra en Ucrania. Estas son baterías que se usan activamente en drones de combate, en particular, en FPV. "El mes pasado, recibimos una gran orden de Rusia por cientos de millones de yuanes.
Antes de firmar el contrato, nuestra planta fue visitada por funcionarios rusos para verificar la calidad de los productos", dijo un representante de una de las empresas en Dunguan. Señaló que el contrato se elabora a través del sistema de intermediarios de dos niveles para mantener la confidencialidad con el consumidor final. Además, este esquema permite a las empresas chinas evitar la violación directa de las sanciones internacionales.
Los fabricantes de drones chinos dicen que ahora su industria está literalmente "revivida" y ahora las órdenes internacionales representan un 70-80%. "No entendemos la política. Quien paga es, así que vendemos", dijo el interlocutor. El año pasado, Rusia importó el doble de baterías que Ucrania.
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